6 motivos para perderse entre viñedos
Un plan de enoturismo en verano te permitirá vivir en primera persona cómo es la vida en una explotación vitícola antes de la vendimia y disfrutar con tus seres queridos
¿Sabes cómo huele un viñedo en verano? El sol provoca que las uvas vayan madurando y desprendan un olor muy característico que se apodera del ambiente. El perfume de un viñedo en plena efervescencia es uno de esos olores que se fijan en nuestra memoria y nos acompañan de por vida. Esta pequeña anécdota olfativa forma parte de la experiencia de practicar enoturismo en verano.
Seguro que alguna vez has escuchado una pregunta tópica de esta época del año: «¿Eres más de mar o de montaña?». Sin embargo, esta dicotomía hace mucho tiempo que ha sido superada. Numerosas personas aprovechan el verano para conocer ciudades, hacer turismo cultural y adentrarse en regiones sorprendentes donde el mar y la montaña conviven en harmonía. Por ejemplo, en las Rías Baixas es posible recorrer pueblos marineros y ciudades vibrantes, pasar el día en la playa, hacer senderismo, visitar museos, descubrir el patrimonio histórico de esta zona, observar el atardecer con una copa de vino en la mano y vivir las mejores experiencias de enoturismo en verano.
¿Por qué elegir un solo plan si puedes gozar de todos ellos?
A continuación, te vamos a contar por qué disfrutar una experiencia de enoturismo en verano mejorará tus vacaciones, te permitirá pasar tiempo de calidad con tu familia y te ayudará a descubrir la historia, la naturaleza y la cultura de las Rías Baixas.
Puentes, festivos, vacaciones… El calendario se pone disfrutón
Aunque es posible disfrutar del mejor enoturismo en las Rías Baixas en cualquier momento del año, el calendario veraniego aumenta las opciones de organizar una escapada de este tipo. ¿Por qué? Hay varios festivos, muchas personas hacen puentes tanto en julio como en agosto, y, claro está, es la época en la que más trabajadores se toman unas merecidas vacaciones y dejan atrás la rutina diaria.
¿Qué implica esto? Tienes más días disponibles para organizar planes y exprimir cada minuto al lado de las personas que consiguen que tu vida sea mejor.
Durante estos días puedes reservar una experiencia de enoturismo en verano tanto de mañana como de tarde y evadirte durante unas horas del devenir del mundo.
It’s the final countdown. Los viñedos están en su apogeo
La vendimia se realiza habitualmente en los meses de septiembre y octubre. Es imposible establecer una fecha fija, porque depende del nivel de maduración de las uvas y de las condiciones climáticas del verano y el inicio del otoño. Por ello, julio y agosto son los meses en los que los racimos de uvas crecen y los viñedos alcanzan su máximo esplendor.
En propiedades como Pazo Baión, las parcelas conforman un océano verde que, además, gracias a su disposición en colinas, semeja ser un mar sacudido por olas. Todo un espectáculo natural a escasos kilómetros del mar de verdad, ese que está compuesto por agua.
A ello debemos sumar el hecho de que el sistema de conducción de la vid tradicional de las Rías Baixas es el emparrado. De tal forma que las cepas tejen techos de hojas de los que cuelgan los racimos, arrojan una hermosa sombra y permiten a los visitantes caminar bajo las uvas, oler los aromas que desprenden y contemplar cómo la maduración transforma su apariencia visual.
Además, durante estas semanas los equipos de viticultura trabajan de forma continua para cuidar a los racimos y conseguir que lleguen a la vendimia en plenas condiciones y que su calidad sea extraordinaria. ¿Has visto alguna vez a un viticultor trabajar en una vid? Es un proceso artesanal y fascinante que te hipnotizará si decides disfrutar de un plan de enoturismo en verano.
Observar cómo se prepara una bodega para la vendimia
No solo los viticultores redoblan sus esfuerzos durante el verano para asegurarse de que la cosecha sea excelente. En las bodegas también se viven estas semanas a pleno rendimiento porque hay que dejar todo listo para el momento decisivo: la vendimia.
Por eso, gozar con una experiencia de enoturismo en verano sirve para observar en primera persona en qué consisten estos preparativos y cómo los enólogos y demás profesionales que trabajan en una bodega ponen lo mejor de sí mismos para que todos los procesos que se desencadenan tras la vendimia se lleven a cabo con precisión.
El esfuerzo colectivo que se vislumbra en una bodega antes y durante la vendimia resulta especialmente emocionante. ¿No te gustaría ser partícipe de los preparativos de la vendimia y contemplar todo el trabajo que hay detrás de los vinos más soberbios?
Enoturismo en verano, un plan para gozar en familia
Muchas familias se rebanan los sesos para pensar planes que puedan hacer felices tanto a los más pequeños como a los adultos. Al fin y al cabo, no todo puede ser ir a la playa un día tras otro, porque eso acaba aburriendo a todo el mundo. Organizar una escapada de enoturismo en verano en la zona de las Rías Baixas puede ser una opción idónea para contentar a todos los miembros de la familia. ¿Por qué?
Los adultos pueden catar frescos y aromáticos albariños, descubrir cómo se elaboran y recopilar nuevos datos sobre las Rías Baixas, sus gentes y su historia. ¿Y los niños? Una propiedad abierta a la naturaleza como Pazo Baión es un espacio fantástico para que los pequeños puedan correr, saltar, jugar y experimentar con todos sus sentidos las bondades de la naturaleza. Además, en la bodega podrán maravillarse con los equipamientos de vanguardia que se emplean para elaborar los vinos.
Hay pocas cosas más placenteras que divertirse en familia y, de paso, recabar nuevos conocimientos y construir recuerdos que nos acompañarán de por vida.
Viticultura, gastronomía y Rías Baixas. Una unión con miles de años de vida
Hay territorios con una idiosincrasia muy marcada. Las Rías Baixas es uno de ellos. Esta zona de Galicia está marcada a fuego por dos elementos de enorme trascendencia:
- Las rías, que tienen una relevancia económica, social y cultural sin parangón. De ellas salen algunos de los frutos del mar más codiciados de Europa, la materia prima de una gastronomía reconocida internacionalmente.
- Los vinos, que han situado a las Rías Baixas en el Olimpo vinícola mundial y que se traducen en el territorio en forma de miles y miles de hectáreas de viñedos.
A través de una experiencia de enoturismo en verano puedes descubrir la intensa relación que existe entre el mar y los viñedos, entre los mariscos más sabrosos y los vinos más frescos, frutales y florales. ¿Por qué? En espacios de enoturismo como Pazo Baión los guías hacen un recorrido por la historia de esta tierra y de su pueblo para visibilizar cómo el mar afecta a la elaboración del vino y, sobre todo, cómo el maridaje entre frutos del mar y albariños es el pilar maestro de una gastronomía en auge.
Catar las últimas añadas antes de que se comiencen a elaborar las de este año
La mejor forma de conocer un vino es, sin duda alguna, catándolo. Por eso, todo plan de enoturismo en verano tiene que incluir una cata guiada que te permita desentrañar los secretos de las elaboraciones con la ayuda de una persona experta.
Además, una experiencia de enoturismo en verano tiene una ventaja añadida con respecto a una escapada que se celebre, por ejemplo, en otoño. ¿Cuál? Ya es posible disfrutar de la última añada de los vinos jóvenes. Por ejemplo, en el caso de Pazo Baión ya ofrecemos en las catas la cosecha de 2023 de nuestro buque insignia, después de que haya estado elaborándose durante un año.
Aunque los vinos tienen una personalidad muy marcada, en cada añada se pueden detectar matices diferentes, nuevos aromas y un desarrollo en boca ligeramente distinto.
Probar una nueva añada es toda una aventura que, además, se intensifica si el vino se degusta acompañado de un maridaje que complemente sus aromas y que combine bien con su cuerpo y personalidad.
Afrontar el final de un tour de enoturismo en verano es todo un placer porque en la cata se pueden desplegar todos los conocimientos adquiridos durante la experiencia y emplearlos para disfrutar de todas las virtudes de los grandes vinos.
En definitiva, si quieres probar algo nuevo, salirte de los planes tradicionales estivales y organizar una andanza que sea apta para todas las personas, sin importar su edad ni sus intereses particulares, te animamos a que pruebes una experiencia de enoturismo en verano por las Rías Baixas. Este plan te permitirá adentrarte en el alma de la tierra del albariño y pasar unas horas de ensueño en un entorno natural y patrimonial mágico.